Marco Rivera, Adelfa Callejo y Tony Casillas en Arlington |
POR SANDRA VELÁZQUEZ
ARLINGTON -- A sus 88 años, Adelfa Callejo se desplaza con firmeza, -un bastón la ayuda un poco, pero muestra una entereza admirable y se conduce con la dignidad de una mujer sabia.
Así se le pudo ver el lunes 26, durante la noche de celebración de la Herencia Hispana de los Cowboys, en la que fue distinguida con el NFL Hispanic Heritage Leadership Award por ser, a través de su activismo y su trayectoria como abogada, un ejemplo de liderazgo entre la comunidad hispana.
Los premios reconocen las contribuciones de líderes hispanos en cada área metropolitana con un equipo de la NFL, y Callejo fue elegida entre otros logros, por ser la primera hispana en graduarse de la escuela de leyes Dedman School of Law de la SMU (Southern Methodist University).
Callejo apareció flanqueada por los dos ex jugadores de Dallas, Tony Casillas y Marco Rivera en la cancha del estadio, luciendo serena, sonriente y satisfecha por el reconocimiento no solo hacia ella en lo individual, sino a toda una comunidad.
"Me siento orgullosa de que sea reconocido mi pueblo, mis latinos, mis inmigrantes, porque es importante que nos reconozcan, que sepa el pueblo americano de las contribuciones que hemos hecho", dijo momentos después de recibir la estatuilla de cristal antes del silbatazo inicial.
Los festejos el estadio de los Cowboys -con bailes folclóricos, un desfile de banderas latinoamericanas y la presencia de latinos prominentes la emocionaron.
"Primeramente hay que sentir orgullo. Conocer nuestra cultura. De dónde venimos. No podemos llegar a donde queremos ir si no sabemos de dónde venimos. Tenemos una cultura muy bonita, somos biculturales, bilingues, somos muy especiales", declaró Callejo.
"Desgraciadamente ha habido tanta discriminación que nos han robado el orgullo, nos han robado la autoestima, y eso, tenemos que hacer algo por ello, pero depende de cada uno de nosotros hacerlo".
A Callejo, la primera hispana en practicar la abogacía en Dallas, también le sobran las palabras para hablar sobre la importancia de fomentar la educación entre los latinos.
"La educación es sumamente importante, esa es realmente la llave a la libertad y a la igualdad de oportunidad, en todo sentido, en la cuestión de economía, de trabajo, de contratos... de toda clase de oportunidades, se abren la puerta cuando la persona está educada".
Además de ser una activista incansable en favor de los derechos civiles de los menos privilegiadados, -una persona cuyos primordiales temas de conversación giran en torno a la educación, lo mismo que a la búsqueda de la igualdad y la justicia, Callejo es una clara fuente de inspiración entre sus colegas.
En 1999, una estudiante de leyes de la Stanford University se centró en la trayectoria de Callejo -más de 40 años de práctica profesional en el área de lesiones personales, familia y justicia criminal, para elaborar su tésis.
Callejo nació el 10 de junio de 1923 en Millet, Texas de padre mexicano y madre mexicoamericana. En 1939 se graduó de la Cotulla High School y después de fue a vivir a California.
Más tarde regresó a Dallas, donde trabajó como secretaria mientras estudiaba por las noches en la SMU, de donde se graduó a los 37 años, en 1961.
Sus esfuerzos por impulsar mejoras en la calidad de la educación en el área son incansables.
"En Dallas hay 33 escuelas que son inaceptables", afirma Callejo. Y entonces lanza un pedido.
"Yo quiero, si alguien me quiere hace un homenaje, quiero que me lo hagan en nombre de que adopten las escuelas que son inaceptables para hacerlas reconocidas y hacerlas ejemplares, esa es mi meta, mi anhelo, mi ambición. Pero necesito la ayuda de toda la comunidad".
"Necesito que los padres de nuestros hijos se ocupen de la educación de sus hijos, si ellos nos ayudan, nosotros estamos dispuestos. Hay suficiente liderazgo y recursos en nuestra propia comunidad para poder lograr ese éxito", reitera.
De los jóvenes sin documentos que son universitarios, opina que merecen una oportunidad.
"Esos jóvenes vinieron de muy pequeños, la culpa no es de ellos y no se les debe de castigar. Se les debe dar la oportunidad... Desgraciadamente la política siempre entra en todo eso, por eso tenemos que votar, salir a votar para que reconozcan nuestro voto, para que respeten nuestra voz. Nuestro voto es nuestra voz. Tenemos que hacer eso cuanto antes, para poder tener fuerza, para que nos oigan, nos escuchen".
Sobre el estancado movimiento en busca de una Reforma Migratoria estima que no hay un liderazgo establecido.
"Lo que pasa es que no hay suficientes líderes. No tenemos un solo líder nacional. Tenemos distintos líderes en las ciudades, en Chicago, en Nueva York, pero un líder nacional, del tipo de Jesse Jackson, Al Sharpton, de Martin Luther King, el día que tengamos un líder nacional que pueda unirnos a todos: salvadoreños, hondureños, a todo el mundo, y que todos trabajemos juntos... y que todos unimos luchemos por igualdad de oportunidades para todos nuestros hijos".
Si hay alguien que padeció la desigualdad y la discriminación ha sido Callejo, quien recuerda que en su juventud las cosas fueron muy diferentes a lo que son en la actualidad.
"Mis abuelos están sepultados en los cementerios para mexicanos, la discriminación existía hasta en los cementerios", recordó.
"Hasta en la muerte discriminan contra nosotros".
En mayo de 2011, el Distrito Escolar de Dallas inició la construcción de lo que será la Escuela Primaria Adelfa Botello Callejo, en honor a la activista.
Escríbele un correo a Sandra Velázquez: svelazquez@hoydallas.com